Debido a las elevadas temperaturas de las dos últimas semanas en el norte de la provincia de Cáceres, los restos orgánicos del interior de la compostera se han secado demasiado. En la última medición la temperatura interior había caído hasta los 20 ºC por lo que decidimos añadir algo de agua y airear y remover bien la mezcla.

Estamos sufriendo las consecuencias de haber empezado el experimento demasiado tarde. Esperemos que consigamos solucionarlo.